¿Te imaginas el juego preliminar perfecto? Ese que es capaz de fusionar todos en uno, relajándonos, desinhibiéndonos, excitándonos, ese que aviva nuestros sentidos y presagia grandes momentos. Pues ese no es otro que un fantástico masaje erótico, de los que comienzan despacito, sin prisa, recreándose en cada descansillo, en cada pliegue. Y para hacerlo solo necesitas dos cosas: unas manos dispuestas y un aceite de masaje que estimule cada centímetro. Como creemos que no es bueno arriesgar en lo esencial, te proponemos el aceite de masaje erótico orgánico de Shunga. Ahora elige: sirope de arce, almendra dulce, té verde o completamente natural (sin sabor y sin olor). Cuatro aromas, cuatro sensaciones. Difícil, ¿verdad?
Con antioxidantes y vitamina E, entre sus ingredientes (de origen 100% orgánico certificado) se encuentran aceites de girasol, canola, sésamo, aguacate y pepita de uva, prensados en frío para mantener sus propiedades naturales. Este aceite, enriquecido también con ylang-ylang (estimulante), no deja la piel grasa, es completamente apto para veganos y además ¡se puede comer!
Explora, recorre, roza, abre el apetito y devora. ¿Se te ocurre algo mejor?
Para usarlo, solo vierte una pequeña cantidad de aceite en las palmas de tus manos, frótalas ligeramente para que adquiera una temperatura agradable, y luego extiéndelo en la parte del cuerpo que quieras estimular, las opciones son infinitas.
Sobre Shunga
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Imprescindible
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Es genial no te deja las manos grasienta como otros aceites, lo recomiendo.
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