Peter Berlin, el icono gay de los 70 que enviaba 'selfies' eróticos por correo

Peter Berlín, el icono gay de los 70 que enviaba 'selfies' eróticos por correo
Sara Martínez 5/5/2022

“Anticapitalista, antitrabajo, prodrogas y prosatisfacción sexual”, así define Michael Bullock, editor de Berlin: Artist, Icon, Photosexual a Peter Berlin. ¿Otra manera de describirlo? Fotógrafo, pintor, modelo, estrella del porno gay de los 70, diseñador, hedonista, exhibicionista y con una energía sexual tan excesiva que era el único acicate para cada uno de sus movimientos. ¿Exageramos? “Nunca me importó ser rico y famoso, solo quería vestirme y follar”. Pero para conseguirlo fue un adelantado a su tiempo, un pionero dando forma a algo tan híbrido que no acababa de encajar plenamente ni en el arte ni en la pornografía. Porque antes de que el móvil se nos petara de 'fotopollas' de cuestionable gusto, antes de Instagram, las aplicaciones para ligar y los selfies, este rubio de pelo paje y libido superpoderosa enfundó su esbelto y musculado cuerpo en la ropa ajustadísima que él mismo confeccionaba y cogió la cámara para convertirse en el primer fotosexual masculino de la historia. El término no es nuestro, sino de Bullock, que se ha encargado de estudiar su obra, investigar al personaje y editar el único libro que reúne su trabajo.

Armin Hagen Freiherr von Hoyningen-Huene nació en Lodz, Polonia, en 1942. Dejó la casa paterna antes de cumplir los veinte, según unos por decisión propia y según otros obligado por sus padres, que no aceptaron con demasiado agrado su homosexualidad. Empezó a trabajar en un taller de fotografía y pronto conoció al pintor Jochen Labriola. Él, su “camarada”, fue el hombre que le enseñó a pintar y lo sacó de Alemania. Después de vivir en París, Roma o Nueva York, llegaron a San Francisco, la ciudad en la que nació Peter Berlin y de la que ya no se ha movido. Armin inventa a Peter, un personaje artístico, un alter ego sexual que alcanzó pronto el estatus de icono gay, especialmente tras rodar sus dos películas porno Nights in Black Leather y That Boy.

Comenzó entonces un novedoso y lucrativo negocio, el envío por correo de selfies eróticos a una comunidad gay ávida de otros modelos distintos a los estereotipos masculinos promovidos por Hollywood. Lo inédito de la empresa de Peter es que era independiente. “No fue musa para otro artista o modelo para un pornógrafo; tampoco era un símbolo sexual producido por un estudio de cine, como Garbo, Brando o Monroe. No esperó a que un benefactor adorador y poderoso le entregara la maquinaria capitalista de producción estelar. Como hombre gay declarado, tales herramientas solo estaban disponibles para sus contrapartes que habían accedido a permanecer en el armario con el propósito de convertirse en iconos culturales. Berlin, por otro lado, se valoraba a sí mismo y a su sexualidad con tal orgullo militante que tomó su identidad en sus propias manos y se convirtió en su propia musa”, explica Bullock.

Nunca sentí vergüenza por mi homosexualidad. Me encantó desde el primer día. Nunca he tenido ese sentimiento, 'pobre de mí, soy gay y estoy tan discriminado'”, asegura Berlin. “Me di cuenta desde el principio que para muchas personas el sexo no era tan importante como lo era para mí. Lo hacen entre las 17.30 y las 18.00, quítatelo de en medio: 'Vale, ya podemos salir a cenar'. Para mí, era toda mi vida: mis fotografías, las películas, la travesía diaria”. Vivió como le dio la gana, ese es su mayor logro.

“Real para mí es cuando camino por las calles y me pasas, te miro, me miras, nos cruzamos, y luego miro hacia atrás, y tú miras hacia atrás, y luego te detienes”. Con 79 años sigue viviendo en San Francisco y echa de menos la energía sexual de Peter. “Después de correrte, dices: 'Déjame en paz'. Quiero ir a dormir'. El clímax es como morir. ¿Entonces qué hice? Lo mantuve”. Esa fue siempre la filosofía de Berlín, alargar al máximo los buenos momentos.

Foto de portada. Fotograma para collage de la imagen: That Man - Peter Berlin - 2005 - Jim Tushinski

SYSTEM_GEOWEB_TITLE

Detectamos que navegas desde una ubicación diferente a la que corresponde a esta web. Por favor, confírmanos que sitio quieres visitar