En cuanto hemos escuchado hablar del fórnix anterior nos hemos acordado del filange izquierdo (solo los muy fans de Friends sabrán de lo que hablamos). Pero resulta que no es la pieza inventada de un avión sino una parte de la vagina, así que ¿cuánto sabemos en realidad de nuestros genitales? Porque lo cierto es que no paramos de descubrir cosas nuevas, puntos o zonas más o menos sensibles que siempre han estado ahí y de las que la mayoría teníamos la misma idea que de mecánica aeronáutica. Lo fantástico es que la ignorancia tiene cura y el premio, en este caso, no es un aprobado sino un placer desbordante. ¿Listos?
¿Qué es y dónde se encuentra el Punto A?
En la década de los 90, el médico malayo Chua Chee Ann hizo públicos los resultados de un estudio sobre sequedad vaginal. En él, sostenía que la estimulación de lo que hoy conocemos como punto A o zona AFE (Anterior Fornix Erotic Zone) incrementaba considerablemente la lubricación y la excitación provocando en algunas mujeres orgasmos de una intensidad muy superior a los que habían experimentado antes.
Entonces, ¿qué es este punto y dónde se encuentra? En primer lugar debes saber que el debate de los médicos y profesionales de la sexología no se centra en la presencia de esta zona, que sí está constatado que exista, sino en los efectos que estimularla provoca en las mujeres. No es raro, sabemos que cada cuerpo es distinto y reacciona de diferentes maneras a los estímulos. Por lo tanto, lo que llamamos punto A es el fórnix anterior. El fórnix (porque existe un fórnix anterior, un fórnix posterior y fórnices laterales) es un surco que rodea el cérvix y que se encuentra en la parte más profunda de la vagina. El anterior, que es el que aquí nos interesa, es el que se ubica delante del cérvix, una hendidura con una profundidad de entre 2 y 2,5 cm y a unos 7 o 7,5 cm de distancia de la entrada de la vagina.
¿Cómo diferenciar el Punto A del Punto G?
Con tanto punto y tanta letra no es difícil hacerse un lío, sin embargo, el Punto A y el G son completamente distintos, aunque ambos se encuentren en la pared frontal de la vagina. El G, para empezar, no es un órgano o un punto anatómico exacto, es más bien un área de tejidos más sensibles que se caracteriza por su tacto rugoso y que se encuentra mucho más cerca de la entrada de la vagina que el punto A. El punto A, en cambio, se encuentra a mucha más profundidad, en la parte más interna de la vagina, y su estimulación provoca, entre otras cosas, una lubricación intensa y rápida.
¿Cómo estimular el Punto A?
Aunque son infinitas las cosas que puedes hacer con tus propias manos, estimular el punto A no es una de ellas. A no ser que tengas las manos de Hulk es difícil que el tamaño de tus dedos sea suficiente para alcanzarlo. La mejor manera de estimularlo, a solas o en pareja, sería a través de un juguete o de la penetración. ¿Un consejo? No te olvides del clítoris. Una vez que encuentres tu punto A, combina la estimulación de ambas zonas para que el placer sea mayor y los orgasmos múltiples.
Mejores juguetes para estimular el Punto A
Los mejores juguetes para estimular el punto A son aquellos elaborados en silicona suave, de gran longitud insertable y con una pequeña curvatura en su extremo. El Satisfyer A-Mazing 2, específicamente diseñado para llegar al punto A, el Petting Hippo con 16,5 cm insertables, el Picobong Moka con 16 o el Svakom Cici con un cabezal acanalado y completamente flexible son algunos de los más recomendados para alcanzar la gloria.
Mejores posturas para estimular el Punto A
Hay diferentes posturas que ayudan a estimular el punto A, no obstante, las más recomendadas por los expertos para conseguirlo son:
- La postura del perrito.
- La mujer boca abajo y el hombre por detrás.
- La mujer sentada en el borde de la cama y la pareja sexual arrodillada delante.
- Tumbada boca arriba y levantando las piernas mientras el hombre se coloca de rodillas y pone las piernas de la mujer sobre sus hombros.
